La ciudad de Bogotá se encuentra localizada en una zona catalogada con nivel de amenaza intermedio para la ocurrencia de sismos; aunque se trata de eventos que en muchas ocasiones no percibimos por su baja intensidad y magnitud, no debemos desconocer el riesgo al que está expuesta la capital, dijo el concejal del Polo Democrático Alternativo, Celio Nieves Herrera, durante un debate que realizó, el cual estuvo enfocado en la necesidad de implementar y fortalecer las acciones que debe emprender el Distrito para atender las emergencias que puedan producirse a partir de un sismo de gran magnitud. Igualmente cuestionó la carencia de un Plan de Acción además de la generación de mayores instrumentos para la prevención de desastres.
El cabildante demostró, mediante su exposición, que el Distrito Capital no está preparado institucional, social y económicamente para brindar a los bogotanos una atención humanitaria de emergencia, ni mucho menos para garantizar la estabilización socioeconómica de la ciudad y del gran número de infraestructuras que serían afectadas, razón por la cual requirió al gobierno distrital informar a los ciudadanos sobre disponibilidad de alojamientos temporales y de equipos para el rescate de víctimas, al igual que sobre la existencia de una política de salud para atender este tipo de emergencias.
Nieves Herrera señaló que frente a un sismo de 7.0 en la escala de Richter, de acuerdo con el diagnóstico de riesgos del Instituto Distrital de Gestión de Riesgo y Cambio Climático (Idiger), a 2016, cerca del 46% de las construcciones del Distrito resultarían afectadas de manera considerable, obligando su demolición y reconstrucción total. En tal sentido, aseguró el concejal del Polo, las localidades más afectadas, de acuerdo con el porcentaje de edificaciones que presentarían daños entre fuertes y severos, serían en su orden: Chapinero: 43%; Usaquén y Fontibón: 42%; Santafé y San Cristóbal: 38%; Barrios Unidos, Tunjuelito y Rafael Uribe Uribe: 33%; La Candelaria: 32%; Suba y Ciudad Bolívar: 31% y Bosa 30%.
Otro punto, no menos importante del debate, se enfocó en la necesidad de ejercer control al proceso constructivo y a la calidad de los materiales de obras en Bogotá. Dijo el cabildante que es muy poco lo que se trabaja este sentido, por lo que solicitó a las autoridades encargadas de expedir licencias de construcción y de realizar control urbano, tener en cuenta que la calidad de las edificaciones son uno de los determinantes más importantes en materia de prevención de desastres, y en esta materia, nuestra ciudad muestra graves falencias a la hora de enfrentar un sismo. El debate se suspendió quedando pendiente la respuesta de la administración distrital, lo cual se hará en una próxima sesión.