Agencia Andes
Representantes de las Farc y del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ratificaron el pasado 11 de mayo en La Habana el compromiso de impulsar el proceso de paz con el Gobierno de Juan Manuel Santos y dijeron que persistirán en su objetivo con el gobierno resultante en su país en las elecciones de 2018.
Los máximos líderes de ambas agrupaciones insurgentes, Timoleón Jiménez ‘Timochenko’ (Farc) y Nicolás Rodríguez ‘Gabino’ (ELN), expresaron el propósito de sumar fuerzas para alcanzar “la paz completa” en su país, afectado por más de medio siglo de confrontación armada.
Afirmaron que este contacto, el primero que realizan públicamente esos líderes desde las firma del acuerdo de paz entre el Gobierno y las FARC-EP en noviembre del pasado año, permitió comprobar el interés compartido de hacer del derecho de las víctimas de la guerra el centro de esos procesos para la salida no violenta a la situación.
En diálogo con la prensa, Gabino señaló al resurgimiento del paramilitarismo en su país como el principal obstáculo a los esfuerzos de paz que reanudará el ELN con el Ejecutivo colombiano el 16 de mayo próximo en Quito, Ecuador.
Tras denunciar la responsabilidad del Estado colombiano en el surgimiento de ese flagelo, y el apoyo que le ofrecen las élites dominantes, instó a buscar mecanismos para proscribirlo, como fórmula dirigida a extirpar la violencia de la vida política de ese país.
“No vemos voluntad de una lucha frontal contra el paramilitarismo. La paz no puede ser retórica; mostrar hechos es esencial”, apuntó.
Por su parte, Jiménez expresó la satisfacción de las FARC-EP por los resultados del encuentro, y reafirmó la disposición de ese grupo guerrillero de completar los compromisos asumidos para iniciar la búsqueda de una paz con justicia social en Colombia.
Ambos agradecieron el apoyo de Cuba, Noruega y Venezuela, así como de Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales y países en los esfuerzos de paz que, coincidieron, serán exitosos debido a la implicación en ellos de la sociedad colombiana.