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El reciente estudio demoscópico realizado por Celag Data sobre Colombia, el cual se llevó a cabo entre el 27 de mayo y el 16 de junio de 2024 mediante 2.036 entrevistas presenciales realizadas en los 25 departamentos más poblados del país, en localidades tanto urbanas como rurales, y controlando cuotas de género, edad y estrato socioeconómico, revela un amplio apoyo a las reformas sociales que promueve el Gobierno del presidente Gustavo Petro.

Tras casi dos años como presidente, Gustavo Petro mantiene una imagen positiva alta, 42,1% (muy superior a la mayoría de mandatarios en América Latina una vez que superaron su primer año de mandato), no obstante la sistemática campaña de desprestigio desplegada por los sectores de oposición y el conglomerado hegemónico de medios de comunicación de propiedad del capital concentrado en Colombia.

Un 61 % de los colombianos respalda las reformas sociales, particularmente la pensional y la laboral.

En relación a la intervención de las Entidades Promotoras de Salud (EPS)), es respaldada por el 48 % de los colombianos frente a un 40% que la rechaza.

Otros datos de la encuesta

• El principal hallazgo de la encuesta es el amplio apoyo que recibe el Gobierno de Gustavo Petro cuando se pregunta por sus iniciativas políticas.
  • Muy alto respaldo en relación a la reforma laboral y a la reforma del sistema de pensiones (un 61 % de los colombianos las aprueba).
  • En relación a la intervención de las EPS (Entidades Promotoras de Salud), es respaldada por el 48 % de los colombianos (frente a sólo un 40% que la rechaza).

  • Un 64 % de los colombianos y colombianas secundan al presidente, afirmando que “Es mejor reemplazar la explotación de petróleo y gas por energías renovables como solar, eólica, etc.”, contra un 26 % que afirma que “Es mejor continuar explotando el petróleo y el gas para no afectar la economía del país”.

  • En relación al rol del Estado en el precio de las tarifas energéticas, un 68% de los encuestados está de acuerdo con“La regulación del precio de la energía eléctrica, aunque las empresas no estén de acuerdo”.
• Tras casi dos años como presidente, Gustavo Petro mantiene una imagen positiva alta, 42,1 % (muy superior a la mayoría de presidentes en América Latina una vez que superaron su primer año de mandato).
• En cuanto a la evaluación de la gestión de gobierno, el 39,2 %. considera que es buena: esta cifra asciende al 43 % cuando se pregunta por las políticas de apoyo a los más necesitados, y se eleva al 48 %. cuando se evalúa la gestión del Ministerio de Minas y Energía en materia de tarifas de electricidad y combustibles.

• El mapa de sensaciones también es positivo en estos momentos en Colombia: el 37 % de los colombianos dice sentir esperanza y confianza; y sólo un 25 % declara sentir enojo o decepción. Es importante destacar el porcentaje que considera sentir ‘incertidumbre’, 26,6% (un valor que ‘vino para quedarse’ desde la pandemia, tanto en Colombia como en otros países de la región).

• Este estudio demoscópico indagó, asimismo, por una de las cuestiones más mencionadas por el presidente: la posibilidad de que un “golpe blando” estuviera en marcha. Un 52,7 % de la población -una cifra superior a la de los votantes que apoyaron a Gustavo Petro en segunda vuelta- afirma que “Hay sectores que buscan un golpe para sacar del poder a Petro”. Sólo un 34 % piensa que Petro estaría exagerando.
• En lo que respecta a la imagen de otros dirigentes políticos destacamos las siguientes:
• Preguntados los colombianos por quién consideran que es el principal opositor al Gobierno, destaca con mucha fuerza “El uribismo” como respuesta (36,1 %); le siguen el poder económico y los medios de comunicación.

• Finalmente, en lo que respecta a la identificación partidaria de los colombianos, sólo dos fuerzas superan el 20 %, el Pacto Histórico (25 %) y “Ninguno” (34,9 %). El resto de opciones políticas tiene una adhesión partidaria por debajo del 10 %.