Por Alejandro Ocampo Giraldo
El Hospital Universitario del Valle (HUV) nació enfermo, su construcción se demoró 20 años, en 60 años de vida, ha estado a punto de fallecer varias veces debido a una penosa corrupción con la cual nació; que seguramente fue contraída por su estrecha relación con la clase política Vallecaucana.
A partir del 2008 la enfermedad se agravo, hasta la resolución DG3761 del 2007 el hospital licitaba medicamentos con varios laboratorios directamente y compraba al mejor precio. En la era Abadía&Martínez el hospital se dedicó a contratar a dedo, con intermediarios y distribuidores los cuales le vendían al hospital mucho más caro pero que eran referenciados por amigos; esa fue la tarea de la gerente Lucero Urriago. Contrataron a LM Instruments y las sondas que costaban $600 pasaron a valer $3.000; las mantas térmicas que antes valían $39.000, ahora valían $90.000. El HUV generaba $600 millones por el servicio de un angiografo viejo que jubilaron en buen estado, para comprar uno de 2.000 millones que tuvieron guardado por varios años. Hicieron una “alianza estratégica” y el Hospital paso de ganar 600 millones mensuales, a deber más de 1000 millones a un nuevo socio.
En el año 2012 llego el oncólogo Rubiano y la corrupción hizo metástasis. Entre los años 2013 – 2014 trajo “los costeños” un grupo que tenía varias empresas a quienes les dio los contratos C13-176, C13-177, C13-178 y C179. 1000 ampollas de tetanol por valor superior a 120 millones de pesos se dañaron, los costeños terminaron debiéndole al HUV 60 millones de pesos y con una denuncia en la fiscalía con fecha 05/12/2013 y radicado 20145000017401 interpuesta por un trabajador del hospital, por vender medicamentos de contrabando y en mal estado. Rubiano no increpo a los “costeños” regaño y persiguió aquel valiente trabajador por haber denunciado sus nuevos amigos.
Rubiano compró mediante contrato C14-189 postes a $2.900.000, cuando los mismos se cotizaron a $ 600.000 y $ 580.000. Adquirió 9 reflectores de 100 Watts SICOLUZ por $11.587.500. Esos mismos en SIMON COLOMBIA costaban $5.922.000, un sobre costo de $ 6.000.000. En ese contrato el HUV pago 78 millones por elementos que en el mercado costaban 20 millones.
Compró un Televisor Samsung de 60” y un blu ray por valor de 16 Millones, cuando juntos no excedían los 5 millones. Contrato C13-108
En solo el 2015 VALLEpharma presenta sobre costos por $25.000 millones, cuyo dueño es el mismo de LLANOpharma en Villavicencio, a quien la súper salud si fue capaz de liquidarle el contrato en 3 meses, aquí van a cumplir 3 años.
En este año, solo comparando las facturas de febrero y de agosto de medicamentos hay sobre costos por 300 millones de pesos.
La gobernación, las EPS y la Alcaldía de Cali le deben al hospital alrededor de $290.000 millones, y el hospital debe $240.000 millones, si estos 3 le pagan le sobran $50.000 millones, fuera de que lo se han robado en tantos contratos.
Los médicos, enfermeras, cocineros y demás trabajadores no se robaron, ni quebraron el hospital. Despedir 500 personas es un crimen que necesitan cometer para adueñarse de los negocios del HUV; porque el HUV es un gran negocio.