El Telégrafo / Agencia Andes
Lenín Moreno Garcés asumió este miércoles 24 de mayo como presidente de Ecuador para el período 2017-2021, en un acto que se llevó a cabo en el recinto de la Asamblea Nacional.
José Serrano, titular de la Legislatura, tomó juramento a Moreno en el cargo para el que fue elegido por una mayoría de ciudadanos. “Queda usted constitucional y legalmente posesionado como presidente de los ecuatorianos”, dijo. También fue juramentado el vicepresidente Jorge Glas.
En esta sesión, el flamante primer mandatario presentó los lineamientos fundamentales de las políticas y acciones que desarrollará durante su ejercicio, tal como lo dispone la Ley Orgánica de la Función Legislativa.
El mandatario saliente, Rafael Correa, impuso la banda presidencial a su sucesor. Acto seguido se firmó el decreto oficial que certifica a Moreno en su nuevo cargo.
Previamente, Correa entregó el informe, por escrito, de su gestión en estos 10 años de gobierno.
La ceremonia de posesión inició a las 10:00 tras el arribo a la Asamblea, en Quito, de los mandatarios y delegaciones de varios países invitados, así como autoridades locales y nacionales.
En la instalación de la sesión, José Serrano destacó la gestión de Correa. “Recuperó la soberanía y le dio dignidad a la política; es un ejemplo el tema de becas y la salud”.
También señaló que la Asamblea priorizará el combate a la pobreza, inequidad y desigualdad. “Sacaremos leyes para efectivizar la redistribución como un objetivo nacional”.
“Hay líderes que van a la vanguardia y hay líderes que preferimos mantenernos en la retaguardia”
Moreno Garcés, en su discurso central de posesión, anunció que su Gobierno promoverá el diálogo como política fundamental en su gestión porque ese es su estilo.
“Dialogar. Dialogar no es debatir, respeto a quienes piensen lo contrario, debatir es confrontar; el debate solo satisface el ego, pero el diálogo, cómo enriquece, a él tenemos que acercarnos para ceder posiciones, señaló al indicar que ha dialogado con diferentes colectivos y que gran parte de sus sugerencias están incluidas en su plan de gobierno.
Insistió que su Gobierno que inicia este 24 de mayo, luego de 10 años de gestión de Rafael Correa Delgado, buscará el diálogo con “todos y entre todos, con un espíritu libre, con una mente abierta, sin ideas preconcebidas, dispuestos a ceder y a escuchar”. Destacó que por ello cursó invitaciones para la ceremonia de investidura, a todos los candidatos presidenciales de las últimas elecciones.
Moreno también dedicó un capítulo especial en su discurso a la libertad de expresión, ante ello dijo que no puede haber diálogo “sin libertad de expresión, (porque) ella es el alma de un pueblo”.
Aseguró que su Gobierno mantendrá una relación “fresca, fluida y dialogante” con los medios de comunicación y para ello pidió una prensa de calidad y con altura.
Adelantó algunas políticas en materia de comunicación y oficialmente anunció que no habrá Enlaces Ciudadanos “porque su estilo no es el adecuado para un Enlace semanal, a los que multitudes se dieron cita, algo más de 500 veces para informarse, para aprender”.
Sin embargo anunció que mantendrá informado al país de la gestión gubernamental a través de otros canales y muchas conversaciones.
Moreno admitió que prefiere sistemas como el de algunos países europeos “en donde casi nadie sabe quién es el presidente. La ciudadanía está generalmente satisfecha del acceso a los servicios, independientemente de quién esté en el poder”.
“Hay líderes que van a la vanguardia y hay líderes que preferimos mantenernos en la retaguardia, ese es el tipo de liderazgo que prefiero”.
Perfil del nuevo mandatario
Con 63 años de edad, Lenín Moreno Garcés es conocido internacionalmente por su lucha por dignificar la vida de las personas con discapacidad, algo que logró mediante la Misión Manuela Espejo. El modelo fue replicado en naciones como Chile, Colombia, Honduras y Haití.
Como figura política, el mundo lo conoció cuando asumió la Vicepresidencia de Ecuador en 2007, cargo que al que fue reelegido para el periodo 2009-2013.
Su extraordinaria labor por las personas con discapacidad llevó al entonces secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, a designarlo como su enviado especial para ese sector, lo cual asumió hasta 2016, cuando solicitó su separación a fin de dedicarse a la campaña electoral por el movimiento Alianza PAIS.
Junto con Jorge Glas como compañero de binomio, Moreno defendió por toda la nación su programa político basado en el proyecto Toda una vida, que busca la protección de los ecuatorianos desde su nacimiento.
Atención médica a embarazadas, neonatos y adultos mayores, impulso a emprendedores, sobre todo jóvenes, generación de empleos y la construcción de miles de casas, así como el perfeccionamiento del sistema educativo son algunos de los pilares de la iniciativa.
La propuesta de Moreno le permitió ganar los sufragios generales realizados en dos vueltas, la primera de ellas el 19 de febrero de 2017, cuando obtuvo el 39,36 por ciento de los votos, el mayor puntaje de los ocho aspirantes al Palacio de Carondelet, pero insuficiente para ser declarado triunfador definitivo, pues por ley se requiere al menos el 40 por ciento.
La segunda ronda comicial, efectuada el 2 de abril, también le concedió la victoria con el 51,16 por ciento, frente al opositor de CREO-SUMA, Guillermo Lasso.
Por si fuera poco, ante las peticiones de recuento de la oposición por presunto fraude, Moreno fue ratificado tras las revisión de más de un millón y medio de papeletas.