ASOQUIMBO /
La represa de El Quimbo construida en el departamento del Huila por la transnacional Enel-Emgesa, inundó 8.586 hectáreas de tierra, destruyó el río Magdalena y generó irremediables daños ambientales, sociales, culturales y ambientales.
Diez años después, los campesinos y las campesinas que se han organizado en la resistencia a través de Asoquimbo, continúan exigiendo justicia social ambiental ante la impunidad corporativa de este tipo de proyectos extractivistas.
Doña Celina es el mejor ejemplo de empoderamiento de las mujeres formadas durante años de resistencia argumentada por Asoquimbo, quien representa la voz de quienes se han levantado con dignidad por la Defensa del Territorio y la Vida contra la imposición del ecocida Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo por parte del Estado y la Enel y del modelo extractivista minero energético.
Precisamente, el pasado 20 de septiembre de 2024, en representación de Asoquimbo, esta lideresa campesina fue protagonista en el acto de reparación por parte del Estado con la entrega de tierras que hizo el presidente Gustavo Petro.
En su testimonio, doña Celina expresa que “vivir por vivir, no tiene sentido, uno tiene que defender donde ha vivido”.
Mujer y despojo en el Quimbo es un documental que permite compartir la experiencia de las mujeres de la resistencia: sus caminos, las desigualdades históricas de la experiencia femenina, sus vínculos con el territorio (el río, los árboles, sus vecinos, su familia); los impactos que de manera particular han sufrido por la construcción de la represa y la esperanza construida desde la organización para la defensa de los territorios, el agua y la vida.