RESUMEN AGENCIAS /
El pasado jueves 16 de enero se presentó un hecho bochornoso durante una rueda de prensa ofrecida por el secretario de Estado, Antony Blinken: dos periodistas fueron expulsados de manera violenta por agentes de Policía de la sala debido a sus preguntas sobre el genocidio en Palestina por el Gobierno de Israel.
Si ello hubiese ocurrido en países como Cuba, Venezuela, Irán, China o Rusia los medios occidentales hubiera pegado el grito en el cielo, pero como ha sido en EE.UU. hay silencio cómplice.
El periodista Sam Husseini fue brutalmente expulsado de la rueda de prensa de Antony Blinken. Una vez más EE.UU. ha mostrado como coarta la libertad de expresión sobre todo en temas en los que se ha hecho cómplice como el genocidio del pueblo palestino en la Franja de Gaza.
“Primero eliminaron a los periodistas palestinos para silenciar el horror, y ahora van a por quienes tienen el valor de cuestionar desde dentro”, detalló la cuenta Spanishrevolution a través de Instagram.
“¿Libertad de prensa? Solo para los que repiten la narrativa oficial. Esta escena sería un escándalo si ocurriera en China, Rusia o Venezuela, pero en EEUU es ‘defender la democracia'”, detalla la publicación acompañada por el video con la agresión al periodista.
El insuceso
La Policía del Departamento de Estado de Estados Unidos arrastró fuera de la sala al veterano periodista Sam Husseini en medio de la conferencia de prensa ofrecida el jueves 16 de enero por el secretario de Estado, Anthony Blinken.
El argumento para usar la violencia física y cargar al reportero fuera de la sala fue la interrupción sostenida de Husseini al discurso del funcionario, mientras este elogiaba el acuerdo de alto al fuego en Gaza, el cual entró en este domingo 19 de enero.
Blinken daba sus comentarios finales sobre el rol de Washington en la mediación del acuerdo cuando el periodista lo increpó para que admitiera su responsabilidad en los crímenes cometidos contra la población palestina asentada en la Franja de Gaza con armamento estadounidense, sin respeto por el derecho internacional.
Del mismo modo, el periodista Max Blumenthal, de Grayzone News, lo acusó de convertir a 300 periodistas en Gaza en blanco de sus bombas, y cuestionó la decisión de seguir el bombardeo a partir de mayo, cuando el acuerdo ya había sido aceptado por la Resistencia palestina.
“¿Por qué permitiste que ocurriera el holocausto de nuestro tiempo? ¿Cómo se siente que tu legado sea el genocidio? ¿Por qué sacrificaste el orden basado en normas bajo el manto de tu compromiso con el sionismo?”, fueron algunas de sus preguntas incisivas.
En lo personal, lo acusó de continuar el compromiso familiar con el fascismo y el lobby israelí, a costa de la vida de miles de inocentes.
Como Blinken y el secretario de Prensa, Matt Miller, no respondieron a los cuestionamientos, los acusó de sonreír durante el genocidio, ante lo cual fue escoltado fuera de la sala.
A su vez, Husseini preguntó al Secretario de Estado si tenía conocimiento sobre las armas nucleares de Israel y luego cuestionó el rol de Washington en los procesos abiertos por la justicia internacional en La Haya para decidir si consideran genocidio las muertes de más de 50 mil personas en la Franja de Gaza desde octubre de 2023.
Cuando Blinken le pidió “respetar el procedimiento” y hacer las preguntas al final, Husseini le cuestionó: “¿Todo el mundo, desde Amnistía Internacional hasta la Corte Internacional de Justicia dice que Israel está cometiendo genocidio y exterminio, y usted me dice que respete el proceso?”.
Ambos hombres fueron retirados y esposados por la seguridad diplomática.
En su cuenta en la plataforma X, el periodista contó el maltrato recibido a manos de la Policía del Departamento de Estado, y cómo coartaron su derecho a hacer preguntas difíciles pero pertinentes.